Carnet de la Patria, la insólita medida de Nicolás Maduro
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, presentó el jueves el Carnet de la Patria, un documento de identidad electrónico que regulará el acceso a la comida y otros artículos de primera necesidad adquiridos en los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP).
«Este carnet de la Patria tiene un código, en el que va su identidad», explicó Maduro en una conferencia en el Palacio de Miraflores, refiriéndose al código QR que aparece en el carnet. «En los CLAP y muchas otras tiendas del país va a poder hacer sus compras electrónicas sin el uso de billetes», agregó.
Hasta el momento, según indicó, el carnet de la Patria servirá para registrarse en las misiones sociales del país y, además, para recibir los productos regulados que son entregados por el Estado.
Inmediatamente, en las redes sociales, comenzaron a surgir las reacciones adversas a una medida que fue catalogada como “control social” por varios analistas.
Como si no fuera suficiente con la tensión actual en el país debido a la escasez de dinero efectivo motivado a las erradas políticas económicas sobre el cono monetario, Maduro se aventura una vez más al anunciar nuevos y mayores controles para adquirir aimentos y beneficios sociales.
“Con carnet en mano ustedes podrán pagar los Clap, cotizar en la Gran Misión Vivienda Venezuela y participar en planes económicos y sociales del Gobierno”, dijo Maduro a principios de diciembre.
“Debemos cumplirle a nuestro pueblo y en enero debo hacer un balance para llevar los Clap a 4 millones de hogares”, acotó.
En el anuncio ofrecido por Nicolás Maduro, el mandatario no se percató de no mostrar tan de cerca su propio carnet y los datos curiosos que en el aparecen. En primer lugar, el número 000325 ya resulta bastante perturbador, pues siendo el presidente el ideólogo de este brillante mecanismo, debería ser quien obtenga el primer carnet emitido. ¿Quiénes son entonces las primeras 324 personas beneficiarias?
Así como esta duda, queda otra expuesta en el aire: La cédula que contiene el carnet del dirigente nacional no corresponde a su número de cédula registrada en el Consejo Nacional Electoral (CNE). Más grave aún, el número pertenece a una persona fallecida, de acuerdo al ente electoral.