Las cajas de Florencia
Las causas penales contra la familia Kirchner no dejan de avanzar y cada vez son más las consecuencias. Luego de que la ex presidenta fuera inhibida de todos sus bienes por el juez Bonadío, ahora Ercolini ordena hacer un seguimiento de las cajas de Florencia. Las cajas no se encontraban en el Banco Nación como se había dejado trascender; estaban en el banco Galicia.
A poco de anoticiarse, la hija de Cristina Fernández solicitó que “abra inmediatamente» las dos cajas de seguridad que están registradas a su nombre y que fueron previamente fajadas y vigiladas. Florencia Kirchner aseguró a través de un escrito judicial que no tiene nada para ocultar y pretende “evitar el show mediático». Ahora, las cajas de Florencia (las cajas 5783-9-9 y 5873-3-5) serán abiertas luego de sospecharse que en ellas habrá cerca de 4 millones de pesos.
El abogado Gregorio Dalbón –abogado también de Anibal Fernández- aseguró: «Vamos a hacer un juicio patrimonial por daños y prejuicios para que se traduzca en dinero aquel insulto o falsedad de la que es acusada» en referencia a CFK y su disputa con Stolbizer ya que, la diputada del GEN había solicitado: investigar los «extraños movimientos bancarios en las cuentas de diferentes empresas de la familia Kirchner» y aseguró que «existirían cajas de seguridad a nombre de la familia Kirchner y/o sus empresas que atesoran millonarias cifras en dólares». Las cajas de Florencia son una muestra de ello.
Asimismo, el abogado de Cristina Kirchner, Carlos Beraldi, aseguró que esa denuncia por enriquecimiento ilícito es falsa. Además, presentó dos escritos que contienen información oficial del Banco Galicia en el que se encuentran las cajas de Florencia y que darían cuenta de que “todas las operaciones financieras y cambiarias se ajustan a todo tipo de normativa”.
En concreto se detalla en los escritos: «en primer lugar, en cuanto al presunto lavado de activos, no hubo ningún movimiento sospechoso en sus cuentas bancarias ya que todas las operaciones se concretaron a través de los circuitos bancarios y cambiarios oficiales en cumplimiento de las normativas pertinentes». Asimismo, «Tampoco pudo haber una omisión maliciosa en la declaración de activos ya que se trata de operaciones que se han cursado este año, es decir con posterioridad a la declaración de baja que formulara en virtud de haber cesado su mandato como Presidenta de la Nación. «Queda descartado –así- un posible enriquecimiento ilícito ya que tal imputación se basa en la distorsión dolosa de la información sustraída ilegítimamente en el allanamiento del estudio del contador de la familia de Víctor Alejandro Manzanares. Concretamente se pretende hacer aparecer el doble de las tenencias existentes, sumando dos veces los mismos depósitos (primero en dólares y luego en pesos)». Las cajas de Florencia y las de Cristina están bien vigiladas.
Días atrás también se había solicitado información oficial en los bancos de la provincia de Santa Cruz, alli, se determinó que la familia presidencial no poseía ninguna caja a su nombre. En la continuidad de la denuncia de Stolbizer, el juez Ercolini pidió la identificación y el eventual bloqueo de cajas de seguridad supuestamente vinculadas con la familia Kirchner en distintas entidades crediticias de Río Gallegos cosa que luego sucedería en Buenos Aires con las cajas de Florencia.
Cabe recordar que, la existencia de las cajas de Florencia y otras relacionadas con la familia Kirchner surgieron de un allanamiento solicitado por el juez federal Claudio Bonadio en el marco de la causa, denominada «Los Sauces” y la causa “Hotesur”. En ambas, el círcuito se cierra con Lázaro Báez. El juez y el fiscal, Ercolini y Pollicita respectivamente, tienen a cargo una investigación por lavado de dinero cuya hipótesis señala que la empresa hotelera de los Kirchner cobró dinero de empresarios que pagaron por habitaciones de hotel que no fueron ocupadas.