Macri y Larreta: coronavirus, espionaje y el futuro opositor
En la apretada agenda del jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, siempre hay tiempo para la política. A pesar de que suele decir que dedica gran parte de su vida a la gestión, haberse transformado en uno de los líderes de la oposición lo ubicó en otro lugar y ya la política ocupa una parte mayor de su tiempo. En ese marco, a media mañana, el jefe comunal viajó hasta Acassuso para reunirse con el ex presidente, Mauricio Macri. Aunque habían cambiado mensajes, se trató del primer encuentro cara a cara luego de que saliera a la luz la denuncia por espionaje que involucró a un sector de la AFI durante los años de Cambiemos en el poder. En el entorno tanto de Macri como de Larreta minimizaron el impacto político de la cumbre a solas. “Ya lo habían agendado, cada tres o cuatro semanas se encuentran”, confiaron, en coincidencia, cerca de ambos. Es más: siquiera participaron las secretarias de ambos para coordinar el encuentro.
En la reunión, con total hermetismo, se coló la causa que tramita en Lomas de Zamora con el juez Federico Villena. Por ella, Larreta tuvo que ir a observar las pruebas que había, por caso, fotos en un bar con la diputada nacional, Graciela Ocaña, que formaban parte de los documentos que tenía la banda en la que se conjugaban un narco con agentes de la AFI, según la Justicia.
En ese marco, Larreta lo desligó esta semana totalmente al ex presidente: “estoy convencido que ni Mauricio Macri ni su Gobierno han tomado ninguna decisión política en esa dirección, estoy convencido que no tiene nada que ver”. Y agregó, en declaraciones radiales a CNN: “Y estoy seguro que Macri piensa lo mismo: que la Justicia debe investigar a fondo para determinar responsabilidad”. Tras esas palabras, en la cumbre reservada de hoy, Macri aseguró que está “armada”. No perdieron mucho tiempo con el tema y hablaron de la pandemia de Coronavirus, según pudo reconstruir el diario.
En este sentido, el jefe de Gobierno le contó cómo venía dándose los casos en la Ciudad con cierto optimismo porque, a pesar de una suba, no se venían duplicando la cantidad de infectados y, por ahora, el sistema de salud puede soportar la pandemia en la Ciudad. Las mismas fuentes confiaron que, sobre el futuro del PRO, hubo acuerdo sobre «el esfuerzo en sostener la unidad» de Juntos por el Cambio. Larreta suele repetir que tiene una confianza de años con el ex presidente. En 2002 se conocieron cuando la larretista Fundación Sophia le preparó informes de distintas temáticas al entonces presidente de Boca Juniors que buscaba dar sus primeros pasos en política. Al otro año, en 2003 fueron compañeros de fórmula para la jefatura de Gobierno. Desde allí construyeron política de manera conjunta y Macri fue clave para acompañar a Larreta para su sucesión en 2015 contra Gabriela Michetti.
La UIF acusó a Vicentin y a Mauricio Macri
La UIF acusó a la empresa Vicentin de haber simulado su situación de cesación de pagos para fugar y lavar dinero en el exterior e involucró en las supuestas maniobras al ex mandatario Mauricio Macri, al ex presidente del Banco Central, Guido Sandleris; al ex titular del Banco Nación, Javier González Fraga; y a los dueños de la cerealera.
Tal como consigna la agencia Telam el organismo antilavado formuló la acusación en un escrito que presentó ante la Justicia Federal con el que solicitó ser tenido por querellante en el marco de la causa en la que se investigan supuestas irregularidades en el otorgamiento de créditos por 18.500 millones de pesos por parte del Banco Nación a Vicentin durante el gobierno de Cambiemos.
“Existen indicios que nos permiten sostener que Vicentin no solo habría simulado su estado de cesación de pagos sino que, a su vez, habría utilizado su estructura en el exterior y/o la de Glencore para remitir sus ganancias al extranjero”, sostuvo la UIF, que conduce Carlos Cruz, en la presentación realizada ante la fiscalía a cargo de Gerardo Pollicita.
En el mismo texto se agregó que “Vicentin Saic no es una isla, sino que forma parte de una red corporativa que incluye 16 firmas en el país y otras tantas en Uruguay, Paraguay, Brasil y España”.
“Es de destacar el rol de Renova, firma que canaliza parte del negocio de granos del grupo y en la cual se materializa el acuerdo estratégico que Vicentin tiene con el Grupo Glencore, uno de los mayores traders de granos del mundo”, indicó.
Para la UIF, “tanto estas maniobras fraudulentas como sus instigadores, autores, participes y encubridores surgen también claramente dado que las gerencias operativas habrían sido instruidas personalmente por González Fraga para beneficiar a la firma, y éste, a su vez, habría sido instruido al respecto por el entonces Presidente de la Nación”.
El organismo destacó, además, que “el control de esa actividad estaba en cabeza del Banco Central de la República Argentina, por entonces presidido por el señor Guido Sandleris.
En ese contexto, la UIF le reclamó al fiscal Pollicita y al juez Julián Ercolini que se “ordene la inhibición general de bienes respecto de Macri, González Fraga, Sandleris y los empresarios Alberto Padoan y Gustavo Nardelli, y se “proceda a efectuar un estudio de su patrimonio y el de las empresas señaladas a los efectos de reemplazar estas medidas por embargos preventivos suficientes”.
Vale recordar que hace unos días, la fiscalía a cargo de la investigación por supuesta defraudación de la empresa Vicentin recibió al menos 70 archivos con información y documentos enviados desde el Banco Nación que ahora están siendo analizados.
La denuncia que dio origen a las actuaciones se presentó a raíz de un informe de las actuales autoridades del banco que dio cuenta de supuestos créditos irregulares otorgados a la empresa cerealera por más de 18 mil millones de pesos.
En el informe presentado por el director del Nación, Claudio Lozano, se advirtió que la deuda acumulada violó normativa del banco en relación a préstamos a grandes empresas.
En la misma sintonía este viernes Lozano cuestionó a la anterior gestión del Banco Nación por no recuperar crédito. En declaraciones radiales indicó que entre agosto y diciembre del año pasado «ingresaron 890 millones de dólares» en una cuenta del Grupo Vicentin en el BNA, y cuestionó que a «ninguna autoridad de la entidad se le ocurrió ejecutarla para recuperar el crédito».
Lozano recordó, además, que el Grupo Vicentin «triangulaba» exportaciones a través de sus subsidiarias de Uruguay y Paraguay, «evadiendo el pago de impuestos por Retenciones y Ganancias».
«Entre agosto y diciembre ingresaron 890 millones de dólares en la sucursal Avellaneda, mucho más que lo otorgado por el Nación, y esa cuenta que estaba en garantía y podría haber sido ejecutada por las autoridades anteriores tampoco se ejecutó», recordó el director del Banco Nación en declaraciones a FM Late. Lozano agregó que esa cuenta bancaria «estaba vacía cuando nosotros entramos».