Polémico «Status Internacional» de los incendios en Amazonas.

Emmanuel Macrón sostuvo que «es una cuestión real que se impondría si un Estado soberano tomase medidas concretas que claramente se opusieran al interés del planeta».
el debate sería ajeno a la propuesta de ayuda de US$22 millones de los países ricos a Brasil para combatir los incendios en la Amazonía.
Sostuvo que el estatus internacional «es un camino que permanecerá abierto en los próximos meses y años», ya que el reto del climático afecta a todos y nadie puede decir «éste es solo mi problema».
Esos dichos sensibilizaron del presidente brasileño, Jair Bolsonaro, quien este martes exigió a Macron que se retracte como condición para aceptar la ayuda exterior. «El señor Macron debe retirar los insultos que me ha hecho. Primero me llamó mentiroso. Y luego, por información que tuve, (dijo) que nuestra soberanía está abierta en la Amazonía», aseguró Bolsonaro ante la prensa.
Pero, ¿qué pretende Macron?
¿Patrimonio global?
Especialistas coinciden en que falta claridad a la idea que manejó el mandatario francés.
De hecho, Macron se refirió a la palabra «statut», que en francés puede significar tanto «estatus» como «estatuto», traducción que también utilizaron diversos medios para informar al respecto.
Aunque las palabras de Macron fueron las más polémicas, otros líderes han aludido a la protección de la Amazonía como un reto internacional.
El presidente colombiano, Iván Duque, dijo el domingo que planteará en la Asamblea General de las Naciones Unidas en septiembre la idea de un «pacto de conservación» entre los países que tienen territorio amazónico.
Desde 1978 existe el Tratado de Cooperación Amazónica entre Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Guyana, Perú, Surinam y Venezuela, que contempla «la conservación y utilización racional» de los recursos de la cuenca.
Por su lado, el secretario general de la ONU, António Guterres, se refirió el lunes a la selva amazónica como un «patrimonio global».
El gobierno de Bolsonaro procuró desde el inicio tratar el asunto como una cuestión doméstica, cuestionando el interés de países desarrollados en la Amazonía.
Al referirse a la Amazonía el lunes, Macron dijo haber ideado una iniciativa que será presentada a la ONU «para respetar la soberanía de cada país».
Pero en Brasil las declaraciones de Macron cayeron mal también entre muchos críticos de Bolsonaro, señala Santoro, el profesor de relaciones internacionales en la UERJ.
«Hay una visión en muchos sectores de la sociedad brasileña de que existen intereses internacionales queriendo controlar la Amazonía, disputar el control de la selva con el gobierno. Y en momentos de crisis como este, ese tipo de discurso nacionalista gana mucha fuerza en Brasil».