Violencia de género en tiempos de COVID-19 – no estás sola
Lejos de ser un tema cliché, la violencia de género es una problemática que cuenta con “soluciones alternas”, mas no resuelven completamente las cuestiones.
Desde el comienzo del aislamiento social preventivo y obligatorio, las denuncias por hechos de violencia de género aumentaron considerablemente en un 60 %, y los casos de femicidios siguen siendo una preocupación, encontrándose entre los temas que requieren atención y habilitan feria para tratarlos.
Entre el 17 de marzo y el 30 de abril, se resolvieron 471 exclusiones del hogar de los agresores; 1.803 medidas de restricción y prohibición de contacto y comunicación; 124 incautaciones de armas; 171 entregas de botones antipánico y seis disposiciones de colocación de tobillera electrónica.
Vemos las distintas vías propuestas a fin de facilitar la comunicación, pero algo sigue fallando, la violencia de género no va a erradicarse, y la justicia seguirá intentando.
Nos dejan un sinsabor que es difícil de expresar, porque se llega tarde para prevenir y evitar. Las/os abogadas/os nos vemos en la obligación de recordar que no es un tema que empieza a raíz de la pandemia, ni finalizará amén de ella.
Lamentablemente, no es suficiente, y con las noticias sobre las disposiciones de jueces que avalaron las prisiones domiciliarias de detenidos por este tipo de delitos e incluso violadores, no han sido alentadoras y mucho menos optimistas ante el panorama ya descripto.
Creo que las circunstancias paupérrimas atinentes a aquellos que se encuentran cumpliendo una pena por sus delitos cometidos, también deben ser atendidas.
Los defectos de un sistema que no funciona tiene sus consecuencias, en tiempos “normales” la sociedad los deja a un costado, ya bastante con el juicio de valor que tiene al respecto. Por lo tanto, mientras esté sostenido, las condiciones no son relevantes.
No obstante, en épocas de pandemia, aquello que no visualizamos por tratar temas más urgentes, nos golpea la puerta y nos recuerda las falencias que estuvieron siempre.
Será importante no olvidarlas para exigir a quien corresponda su regularización y la revisión de los principios que motivaron la creación de las prisiones, para que no tengan controversia entre en la teoría de su finalidad, y lo que refleja la realidad.
Las distintas herramientas, tales como la habilitación de líneas telefónicas, mensajes por Whatsapp, aplicaciones de socorro, entre otras, son la contraposición de las decisiones actuales que obligan a ponerlas en funcionamiento, cuando podrían evitarlo sin tomar esas medidas antipáticas, carentes de sentido común, y poco profesionales.
La falta de control sobre las decisiones adoptadas generan un clima de incertidumbre inseguridad jurídica, sumado a este contexto completamente excepcional en el que todos nos encontramos vulnerables.
La finalidad de esta noticia es que conozcan las alternativas a considerar en un momento de urgencia, para que aquellas personas que sufran estas aberraciones completamente repudiables, puedan ser correctamente asistidas, y de no serlo, conozcan sus derechos que las amparan y sepan que NO ESTAN SOLAS.
Llamá de manera gratuita al 144 las 24 horas, o comunicarte vía WhatsApp a los teléfonos 11 2771-6463, 11-2775-9047 y 11-227-9048 o por mail a linea144@mingeneros.gob.ar y linea144@mingeneros.gob.ar.
También pueden descargarse la APP 144, que brinda información sobre lugares cercanos a la ubicación de quien la usa para denunciar o pedir ayuda.
O la app. NO ESTAS SOLA, la descargás desde Play Store, una vez descargada aceptás que se sincronice con tu ubicación, cargas cinco correos electrónicos de contactos de emergencia.
Es importante que ellos también la descarguen, que dispongan de datos móviles o wifi para utilizarla.
La vez que te sientas insegura, abrí la app, agita tu celular e inmediatamente le envía la ubicación a tus contactos, y la actualiza cada dos minutos hasta que cortes la situación de emergencia.
LINEA 137 DE ATENCIÓN A VÍCTIMAS DE VIOLENCIA FAMILIAR Y SEXUAL ATIENDE LAS 24HS, LOS 365 DIAS DEL AÑO, EN CABA.
La línea 137 es atendida por profesionales especializados/as que, ante una emergencia o urgencia, ofrece el acompañamiento de un Equipo formado por Psicólogas/os y Trabajadores/as Sociales que llegan a la escena de violencia con personal policial.
Puede comunicarse cualquier persona que necesite ayuda y asesoramiento en el caso de una situación de violencia familiar y/o sexual ya sea víctima, familiar, vecina/o o una institución.